“La lluvia no logró frenar un éxito anunciado”

El Taller Tomalino y otra jornada solidaria inolvidable.

El domingo 30 de abril, el Taller Tomalino (histórico taller de electricidad del automóvil de la calle Martínez al 200) volvió a exhibir su faceta cultural, organizando un multitudinario evento con fines solidarios. La reunión que duró varias horas fue un éxito, pese a que la lluvia se instaló sobre la Ciudad de Buenos Aires durante la jornada. Sin embargo, ya se había anunciado que no habría suspensión y así ocurrió. Una vez que culminó todo, Gabriel, el propietario del taller y gran artífice de la iniciativa solidaria, realizó por escrito un balance, el cual subió a su cuenta de Facebook. El texto es el siguiente:

Hola vecinos, amigos y clientes. Resumo lo que vivimos en nuestro festejo del Día del Trabajador: nos reunimos 300 personas bajo la lluvia a compartir un momento inolvidable.

Recibimos muchas donaciones para el Hogar Dr. Maradona, Fundación AEA Corrientes, Fundación Mirada de Esperanza, Empedrado, Corrientes y RSE Justo Lamas. Estuvimos recaudando para la compra de una máquina Overlock para el Taller de Costura de Empedrado con la rifa de “Un Juego de Te Japonés” donado por Lilia Leirado, del Taller Nagare (todavía nos falta un cachito, gracias Taller Nagare).

Y la pasamos muy bien entre talleres y una variada oferta cultural. Aprendimos  huerta de la mano de la profe Gabriela Labenne. Amasamos pan con María Inés Biedma y su Primer Alimento, mientras contábamos historias del barrio y de vida. Descubrimos cómo hacer queso blanco con Pato Basmadjian y Edy Balyan, mientras se disputaban partidas de ajedrez en el Ricón Armenio. Degustamos el Kéfir, de la mano de Dahnna y su «Qué Kéfir» mientras nos enseñaba sus orígenes y su elaboración. Hicimos cuencos de cerámica con la profesora Lilia Leirado, que nos mostró un poquito de lo que hacen en su Taller Nagare. Patricio Abadi irrumpió con su escalera, delantal y gorro de carnicero para cautivarnos, cuándo no, con su intenso y particular Microteatro.

Todo esto, en el garage de Norberto Balzarini (lo ofreció  gentilmente dado al clima a la intemperie).

A su vez, esto pasaba dentro del Taller Tomalino:

“Rayuela” hacía jugar a chicos y grandes con sus recreativos infantiles a cargo del profe  Diego Erre. Y los chicos intervenían partes del taller, coloreando repuestos usados con pintura acrílica de la mano de la profe Mariana.

 Afuera, bajo el aguacero, estaban Esteban Álvarez Osorio y su Coupe Chevy, Maxi Tomalino con su Fitito y nuestro símbolo, el Jeep. Aguantando los trapos de Auto Clásica Colegiales 23.

Agradecemos a los que vinieron de muy lejos: Santa Clara, El Pato, Wilde, Avellaneda, etc. A pesar de la lluvia y todos los pronósticos. GRACIAS, GRACIAS A TODOS.

La lluvia no logró frenar un éxito anunciado… ¡imposible parar a tanta gente haciendo cosas tan lindas!

¡Felicitaciones Gabriel y equipo!

Fotos: cortesía Facebook Gabriel Tomalino.