Barrio Mío

SEGÚN PASAN LOS AÑOS

Hoy: Superí y Virrey Avilés.

El barrio cambia, así como cambia la ciudad. En realidad, los tiempos cambian. Para algunos, será para bien. Para otros, los que añoran el pasado, lo verán con una pizca de nostalgia. Así y todo, en este grupo también se nuclearán los que vean con buenos ojos el progreso a nivel edilicio y quienes sean reticentes a este tipo de variantes.

Lo concreto, es que nada detiene el paso del tiempo y junto con él, a Colegiales ha llegado la construcción masiva de edificios, «mini-edificios» y unos cuantos tipos de construcciones que crecen a lo alto en forma de viviendas, oficinas y locales.

superi-aviles(1996)

1996.

Un caso emblemático es el de esta esquina. Hasta hace no tanto tiempo, una casita con jardín «reinaba» en la ochava, proponiendo generoso verde a través de su vegetación externa. Limitando con ella, para el lado de Elcano, sí se alzaba un edificio de antigua data. De pronto, a principios de esta década, la propiedad se puso en venta y fue adquirida por un grupo inversor que comenzó a construir lo que ya es parte del paisaje en toda la Capital: locales en la planta baja, departamentos a partir del primer piso.

A principios de 2014, la esquina se llenó de ruido. Camiones de gran porte y mucha maquinaria se entrometieron en la tranquilidad de una zona de casas bajas. Y por varios meses, no se vio ni se escuchó otra cosa que el movimiento constante de una industria floreciente. Un piso, dos, tres… El edificio crecía y crecía, como queriendo no ser menos que su hermano mayor, al que ahora sólo separa una medianera.

superi_Aviles(2014)

2014.

A fines de 2015, al fin, el producto quedó terminado. Una moderna confitería abajo, contribuye a la superpoblación de negocios del rubro existentes en este sector del barrio (de más está decir que esperamos que consiga mucha clientela, al igual que todos los comercios de este y otros ramos), mientras los departamentos, seguramente ya habitados, dominan la escena hacia arriba.

Ni más ni menos que una síntesis de lo que ocurre en una Colegiales que cambia al ritmo de una ciudad que tampoco se queda quieta.

1 comentario

Deja un comentario