Las vacaciones van quedando atrás. Por lo tanto, luego del receso estival, en Juventud de Belgrano se vuelve a sentir ruido de pelota. Los primeros días de febrero, los deportistas de los diferentes planteles de vóley regresaron a la institución para sumarse a la pretemporada, con vistas a la reanudación de los campeonatos de este año.
Como es costumbre desde hace tanto tiempo, las prácticas siguen llevándose a cabo los lunes, miércoles y viernes en el gimnasio de la calle Virrey Avilés. Una de las entrenadoras que se encuentra a la cabeza de las tareas planificadas es Paola Ponce, quien le comentó a este medio: «La idea es seguir con los proyectos que teníamos el año pasado y tratar de trascenderlos un poco más, de llevarlos a otro nivel. Otro de los propósitos es el de aumentar la cantidad de jugadores en relación a 2019, tanto en los equipos de Mayores como en las divisiones inferiores».
Paola, que es entrenadora del sub 14 y el sub 16 del femenino, de Mayores en masculino, y además colabora con el plantel de Mayores femenino, apuntó: «Buscaremos afianzar el grupo que tenemos y si viene gente nueva, sumarla también. En relación a lo deportivo la meta siempre es la de llegar los más alto posible en todos los torneos. Pero entendemos que a principio de año, todos los equipos, hasta que se conozcan, necesitan un tiempo de trabajo como para poder plantear un objetivo concreto. Al menos, se intentará demostrar un buen juego».
«Tenemos todas las pilas puestas»
Por su parte, la preparación física de todos los planteles de vóleibol continúa bajo la labor de Martín Riojas, quien a propósito del inicio de la pretemporada, manifestó: «Empezamos bastante bien. Hubo mucha convocatoria. En general la asistencia da a entender que este año será muy bueno».
Más allá de su función de preparador físico, Martín, en 2020, será entrenador de las categorías sub 18 y sub 21 del femenino, y de las jugadoras que participan en la Liga de Vicente López. Asimismo, seguirá como asistente en Mayores. «El objetivo, en lo que a mí concierne, es que las chicas finalicen el torneo cada vez mejor -indicó-. El año pasado se vio eso. Terminaron jugando más rápido y entendiendo mejor el sistema de juego que uno quería plantear».
En 2019, la tira femenina luchó por un ascenso de categoría que en definitiva, no se dio: «No se pudo por distintas cuestiones y este año, por lo que pudimos hablar, el objetivo será el mismo», explicó Riojas, agregando que a fin de año «los profesores nos pusimos la meta de, primero, completar las categorías de abajo, que son las que ayudan también para buscar un ascenso, y el resto del grupo, jugar mejor. En base a eso buscar el ascenso al nivel D».
Como cierre de la nota, expresó toda su confianza: «Tenemos todas las pilas puestas y estamos convencidos de que podemos cumplir el objetivo que nos trazamos».
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